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¿Qué son las baterías de condensadores?
Las baterías de condensadores son aparatos que ayudan a reducir o eliminar la demanda de energía reactiva y, además, estabilizan el suministro eléctrico.
Se recomienda su instalación en cualquier empresa o establecimiento donde, debido a la utilización de maquinarias que generan energía reactiva, tengan que abonar mensualmente penalizaciones en la factura de electricidad.
¿Cuáles son sus ventajas?
La instalación de baterías de condensadores tiene muchas ventajas, pero pueden destacarse principalmente cinco:
- Mejorar la calidad del suministro eléctrico, optimizando la tensión de la red.
- Reducir las pérdidas de energía, minimizando las fugas de calor del sistema.
- Aumentar el rendimiento de la instalación eléctrica, reduciendo el consumo fantasma.
- Disminuir el importe de la factura de electricidad.
- Incrementar la capacidad de la instalación, ya que reduce la carga de los transformadores, posibilitando la entrada de otras nuevas.
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Cómo funciona una batería de condensadores
Las baterías de condensadores basan su funcionamiento en la absorción de la energía reactiva que generan los aparatos eléctricos. Esto se produce porque en las instalaciones eléctricas hay muchas cargas que, para funcionar, necesitan que se creen campos magnéticos. Estos equipos, que suelen ser inductivos, absorben energía de la red y dan lugar a la creación de los mismos.
El intercambio de energía provoca un consumo suplementario que no es aprovechable por las cargas, y vuelve a volcarse en la red eléctrica, lo que puede provocar sobrecargas en líneas, transformadores y generadores, por eso es penalizado por las compañías eléctricas. Las baterías de compensadores absorben esa energía reactiva y las reparten entre las diferentes cargas, evitando que se vuelquen en la red.
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Instalar una batería de condensadores
Una de las principales ventajas de este tipo de sistemas es su tamaño reducido y compacto, por lo que es posible su instalación en cualquier lugar, con la única condición de que haya un mínimo de ventilación para que no haya problemas de sobrecalentamiento.
La instalación de las baterías de condensadores se suele realizar junto al cuadro eléctrico general de la instalación eléctrica. Con este equipamiento se logra que la energía reactiva no sea absorbida por la red, sino que se reparta entre todos los equipos. La vida útil de una batería de condensadores ronda los 10 años y la instalación debe ser ejecutada por profesionales tras un estudio pormenorizado de los equipos en funcionamiento y del sistema eléctrico.
Cómo calcular la batería de condensadores que necesito
El número de baterías de condensadores que vas a necesitar en una instalación dependerá de la potencia que tengas contratada en el establecimiento y del tipo de funcionamiento que tengan las máquinas de la instalación. Es decir, del tipo de motores que tengan los aparatos y cómo sea su arranque. En cualquier caso, el cálculo será diferente dependiendo de si hablamos de una instalación nueva o de una infraestructura ya existente.
En una instalación nueva, el primer paso es conocer el consumo teórico de cada una de las cargas. Para eso hay que averiguar el factor de potencia de cada aparato y multiplicarlo por la potencia activa de cada una de las cargas. Posteriormente, se sumará el resultado de todas las cargas y se multiplicará por un factor de seguridad (0.75-0.9), para tener un margen ante posibles problemas. Tras esta operación ya sabrás cuál es la potencia óptima de las baterías de condensadores que tienes que instalar.
Si la instalación ya existe, el proceso se simplificará notablemente. Para calcular las baterías de condensadores necesarias, solo harían falta las facturas de la luz del último año. Con estos recibos podrás analizar cuál es el consumo de kWH y cuál es la potencia registrada en los maxímetros del contador de la luz. Si multiplicas ambos datos, sabrás las baterías de condensadores que necesitarás para tu instalación eléctrica. En este caso, la medición es exacta, ya que conoces todos los datos de consumo y puedes prever posibles anomalías.
Las baterías de condensadores son aparatos fundamentales para aumentar y lograr una mayor eficiencia energética. Su uso está orientado, especialmente, para grandes empresas o industrias que utilicen maquinarias potentes. Estos aparatos pueden contribuir a reducir las penalizaciones que abonan las empresas por generar un exceso de energía reactiva, así que si eres propietario de una, quizá deberías plantearte colocar este tipo de instalaciones.
