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¿Qué tipos de calefacción por infrarrojos existen?
Los tipos de calefacción infrarroja que existen hoy en día en el mercado se diferencian entre sí por las ondas infrarrojas. Más concretamente, los tipos de calefacción infrarroja se diferencian entre sí por la longitud de onda:
Calefacción por infrarrojos de onda corta
La calefacción por infrarrojos de onda corta se caracteriza por generar mucho calor sin que la temperatura ambiental aumente. Suele ser la calefacción infrarroja perfecta para calentar estancias que son muy amplias o que tienen el techo muy alto, como las fábricas.
Este sistema funciona de tal manera que el cuerpo que se expone a la onda corta es el que se calienta, sin que el aire circundante se vea afectado por la emisión de calor. En resumen, la sensación es la misma que si pasamos de estar en la sombra a estar bajo la luz del sol.
No obstante, aunque la calefacción no es un sistema tóxico, hay quienes aconsejan no exponer la piel a la onda corta para que nuestro cutis no envejezca antes de tiempo.
Como la calefacción infrarroja de onda corta genera calor sin aumentar la temperatura ambiental, es un sistema que suele utilizarse en las estaciones de esquí para mantener el frío gélido en el espacio sin que las personas tengan esa misma sensación térmica.
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Calefacción por infrarrojos de onda larga
La calefacción por infrarrojos de onda larga trabaja de una manera completamente distinta a la calefacción por infrarrojos de onda corta. En este caso, la onda larga permite calentar los objetos sin emitir los rayos sobre ninguna persona que se exponga a los mismos.
Esto se debe a que la onda larga de la calefacción infrarroja no emite luz, sino que irradia la onda sobre el espacio directamente, calentando de forma paulatina y sin consumir mucha energía. Sin duda, este calor paulatino es más seguro que la calefacción de onda corta.
La peculiaridad de este tipo de calefacción infrarroja es que necesita más tiempo para que una estancia alcance la temperatura que queremos y, en muchas ocasiones, los rayos tienden a subir hasta el techo. Por eso, la calefacción de onda larga no es siempre eficiente.
Suele emplearse en los casos en que necesitamos calentar espacios interiores de uso doméstico, como los salones y despachos, además de patios y terrazas con cubierta.
¿Cómo funciona la calefacción infrarroja?
La calefacción infrarroja funciona a partir de la emisión de ondas infrarrojas. Estas ondas se emiten con una frecuencia determinada cuando las placas de la calefacción se conectan a la red eléctrica. El termostato que incluye la calefacción nos sirve para regular el calor.
La calefacción infrarroja tiene un efecto retroactivo. Mientras que la calefacción infrarroja de onda corta penetra la piel de las personas para darles calor, la calefacción infrarroja de onda larga irradia sobre los objetos para calentarlos y subir la temperatura de ese espacio.
Ventajas y desventajas de la calefacción infrarroja
La calefacción infrarroja tiene una serie de ventajas y desventajas que merecen conocerse.
Ventajas
Por ejemplo, este tipo de calefacción funciona a partir de ondas que transforman la mayor parte de la energía en calor, de forma ecológica y sin crear gases tóxicos para el planeta.
Además, la calefacción infrarroja es más económica que las calefacciones convencionales, es silenciosa y no remueve la suciedad al mover las partículas de polvo o los ácaros.
Desventajas
Entre las desventajas de adquirir una calefacción infrarroja encontramos que tarda mucho más tiempo en subir la temperatura de una estancia que las calefacciones convencionales.
También debemos instalar el equipo en una posición estratégica para que el calor sea eficiente. Por ejemplo, en los baños con azulejo la onda infrarroja no emite tanto calor, ya que este material no es capaz de absorber los rayos y el espacio no se calienta igual.
Instalación de un sistema de calefacción por infrarrojos
La calefacción por infrarrojos de onda corta o larga requiere una instalación muy concreta:
En interior
En interiores, la instalación de un sistema de calefacción infrarroja es muy sencilla porque solo es necesario tener red eléctrica y no se requiere gas natural ni tuberías. Basta con instalar las placas del sistema en las paredes y techos de las habitaciones a calentar.
Cabe decir que siempre se recomienda instalar las placas de la calefacción directamente en el techo para aprovechar mejor la emisión de calor de las ondas. Estas placas, a su vez, se conectan a la corriente eléctrica cuando queramos usar la calefacción por infrarrojos.
En exterior
La instalación de un sistema por infrarrojos en espacios exteriores es la misma que si instalamos la calefacción en espacios interiores. Lo único que se debe tener en cuenta es el número de placas que deben instalarse en el techo de la estancia que vamos a calentar.
En la mayoría de las zonas de exterior es necesario instalar placas en las paredes, a pesar de que esta instalación supone una pérdida del 30% en rendimiento. Según el tamaño del espacio, se debe calcular la distancia entre las placas para propagar bien el calor.
¿Cuánto consume la calefacción por infrarrojos?
Dado que la calefacción por infrarrojos utiliza más del 85% de la energía para transformarla en calor, es increíblemente eficiente cuando la instalamos en el lugar correcto. Si tenemos esta calefacción encendida durante 8 horas, al día consumirá un total de 4 kWh.
