
¿Cuál es el consumo de un radiador de aceite?
Cuando llega la larga temporada de frío, el radiador de aceite puede ser una gran opción práctica para calentar la casa y ayudar al medio ambiente. Sabiendo de primera mano cuál es el consumo de un radiador de aceite podremos tomar medidas para ahorrar dinero.
Podremos elegir entre radiadores de aceite móviles o radiadores listos para instalar en una pared de la casa, con la ventaja de disponer de un termostato y programador que sirven para regular la temperatura ambiental de forma fácil y sin tener que preocuparnos de nada.
En este post hablaremos sobre el coste energético que supone un radiador de aceite y descubriremos si de verdad merece la pena elegir este aparato cuando llegue el invierno, listando algunos consejos muy útiles que nos ayudan a ser más eficientes con el radiador.
Índice de Contenidos
¿Cuánto consume un radiador de aceite?
Desde que la Unión Europea anunciara sus objetivos medioambientales a corto y medio plazo para evitar que la temperatura global sume más de 2ºC en cuestión de décadas, la eficiencia energética con sistemas de climatización se ha vuelto crucial en las casas.
Y si a esto le sumamos la creciente subida de precios de la luz, entonces es indispensable encontrar maneras de calentar los hogares sin que se note en el bolsillo. Por eso, debemos tener claro que cada mes el radiador de aceite va a consumir mucha electricidad.
Para averiguar cuánta energía va a gastar un radiador de aceite, es fundamental tener algunos factores en cuenta que son los que repercutirán en ese gasto, como la potencia del aparato y el número de habitaciones que queremos calentar dentro de la vivienda.
Así pues, si adquirimos un radiador de aceite que tiene una potencia de 750W y lo tenemos en pleno funcionamiento durante una media de cuatro horas cada día, el consumo de energía diario puede alcanzar alrededor de los 3kWh en una estancia de nuestro hogar.
Elige con el genio del ahorro
¿Consume menos que otro tipo de radiadores?
A diferencia de un radiador eléctrico, que sube la temperatura de una habitación a base de emitir aire caliente con la ayuda de un ventilador, el radiador de aceite utiliza el método de convección para seguir calentando la habitación un rato incluso después de apagarlo.
Por otro lado, es cierto que el radiador de aceite tarda una media de 30 minutos en emitir calor y que el radiador eléctrico lo hace al momento. Aun así, cuando vemos las facturas de luz nos damos cuenta de que los dos sistemas de climatización gastan casi lo mismo.
El mercado ofrece radiadores de aceite de bajo consumo que vienen fabricados con geles termodinámicos para retener más tiempo la temperatura ideal en la casa. Son aparatos más baratos que los radiadores eléctricos, aunque el consumo termina siendo el mismo.
Cómo calcular el consumo de un radiador de aceite
A la hora de calcular el consumo de un radiador de aceite en casa, existe una fórmula muy fácil de usar que tiene en consideración el gasto en base al tiempo que tenemos encendido el aparato y a la potencia del mismo Consumo (kWh) = Potencia (W) x Tiempo (h) / 1000.
Para mostrar cómo funciona la fórmula a niveles prácticos, seguiremos con el ejemplo del radiador de aceite que tiene una potencia de 750W. En este caso, vamos a suponer que tenemos el aparato encendido durante 4 horas todos los días. El resultado es el siguiente:
Consumo (kWh) = Potencia (750) x Tiempo (4) / 1000 = 3 kWh
Por lo tanto, la fórmula nos dice que un radiador de aceite en casa tendría un consumo diario de 3 kWh, a lo cual hay que sumar las ventajas de seguridad y comodidad que nos aporta este aparato frente a otros sistemas de climatización disponibles en el mercado.
Dependiendo de nuestras necesidades domésticas, este aparato puede ser una gran alternativa energética frente a otros tipos de dispositivos de climatización para el hogar.
Consejos para hacer un uso eficiente de radiadores de aceite
Ahora que sabemos que el radiador de aceite tiene un gasto energético alto y similar al de otros tipos de radiadores, es buena idea aplicar algunas estrategias que nos van a ayudar a sacar el máximo provecho del funcionamiento de este aparato, por ejemplo:
- Se recomienda mantener la superficie del radiador de aceite limpia y despejada de partículas de polvo para que siempre esté funcionando de forma eficiente. La limpieza se puede hacer una vez a la semana como parte del mantenimiento.
- En la medida de lo posible debemos cerrar la estancia donde tengamos encendido el radiador de aceite, ya que lo último que queremos a la hora de ganar eficiencia energética es que el calor que emite el aparato se escape por ranuras.
- También es aconsejable que el radiador de aceite se encuentre siempre apoyado sobre una superficie plana. Así lo que conseguiremos es que la emisión del calor sea lo más equitativa posible a la hora de expandirse por la estancia de la vivienda.
Por último, cabe recordar que aunque los radiadores de aceite se caracterizan por su alta seguridad y comodidad, es importante evitar hábitos como tocar la superficie metálica justo tras apagar el aparato o acelerar su enfriamiento colocando prendas mojadas encima.