Cuánto consume una nevera

Clasificación energética de las neveras

Para comprender correctamente cuánto puede llegar a gastar una nevera, lo primero en lo que debes fijarte es en su clasificación energética, puesto que este es el modo en el que se mide la eficiencia energética de estos electrodomésticos.

De esta forma, en el mercado podrás encontrar neveras con una clasificación energética que va desde la A, que indica un menor consumo energético, hasta la C que indica que la nevera tiene un mayor consumo y a grandes rasgos es menos eficiente.

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Ficha técnica de las neveras

Entender la ficha técnica de tu nevera es muy necesario para comprender no sólo su correcto funcionamiento, sino también su consumo.

Capacidad

Este es un factor muy importante a la que deberás prestar atención dependiendo de cuales sean tus necesidades específicas. En la ficha técnica se indicará cuánta capacidad admite tu nevera en litros, ya que no es lo mismo adquirir una nevera de 185 L que de 468 L, por lo que según sea la capacidad que necesites en tu vivienda deberás hacer la elección más óptima para ti.

Refrigeración

Es importante también tener en cuenta la refrigeración de la nevera, es decir, en qué medida el electrodoméstico es capaz de enfriar su interior a la temperatura deseada en el menor tiempo posible. Cada frigorífico tiene unas opciones diferentes de refrigeración, con una gama más o menos amplia de posibilidades, según el tipo de alimentos que se vayan a conservar en su interior.

Dimensiones

Las dimensiones de la nevera, así como su peso, son también elementos que aparecen en la ficha técnica y que es importante saber de antemano antes de comprar o instalar tu frigorífico en casa.

Compartimentos

La ficha técnica suele especificar cuántos compartimentos contiene la nevera. Pueden haber neveras con una sola cámara o con doble cámara, lo que evidentemente hace que las funciones y maneras de disponer los alimentos dentro del frigorífico sean muy distintas.

Rendimiento

El rendimiento de una nevera hace referencia de forma directa a su eficiencia, es decir, cuánta energía necesita ese frigorífico para enfriarse a la temperatura deseada, para lo cual cuenta con un sistema activo de enfriamiento y con un sistema pasivo de aislamiento, que evita que la temperatura del exterior afecte a su interior.

En general, cuanto mayor sea el rendimiento más bajo será el consumo que necesitará tu nevera.

Smart

Para terminar, otro factor que aparecerá en la ficha técnica de tu nevera es si esta cuenta con funciones inteligentes, también conocidas como smart, y contará con una explicación de cómo hacer uso correctamente estas funciones inteligentes como pueden ser cámaras integradas en su interior o ajustar la temperatura desde el móvil.

Cuánto consume una nevera en Watts

Dependiendo del etiquetado, tu nevera puede hacer un consumo de kWh distinto. Tener en cuenta la clase energética de tu nevera es importante para obtener un mayor o menor consumo eléctrico. Por eso, a continuación vamos a proporcionarte una tabla orientativa donde podrás ver el consumo de un frigorífico según su etiquetado:

¿Cuántos kWh consume una nevera al día?

Hoy en día es normal preocuparse por ahorrar en la factura de la luz y para ello es vital pensar en hacer un consumo eficiente de los electrodomésticos con los que cuentas en tu vivienda. Las neveras son un electrodoméstico que siempre está en contínuo funcionamiento debido a que es imprescindible para mantener todos nuestros alimentos en un estado óptimo.

Una nevera que está enchufada las 24 horas del día consume de media unos 0,48 kWh y 0,78 aproximadamente, llegando a los 662 kWh al año. Cabe destacar que las neveras nivel intermedio consumen al día entre 0,88 y 1,02 kWh mientras que las que contienen una menor eficiencia energética realizan un consumo energético promedio de 1,39 a 1,77 kWh al día.

No obstante, el consumo energético que hace este electrodoméstico puede llegar a ser bastante diferente según varios factores, como por ejemplo son la clase energética de la nevera en cuestión o la potencia. Estos factores son los que más influyen a la hora de realizar un cálculo aproximado del consumo eléctrico de los frigoríficos, por lo que es de vital importancia tener esto en mente cuando vas a comprar una nevera.

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Consejos para ahorrar en el consumo de la nevera

Si buscas reducir el consumo energético de tu nevera y con ello poder ahorrar algo de dinero en tu factura de la luz, aquí vas a poder encontrar algunos consejos que te ayudarán a lograr hacer un uso mucho más eficiente de este electrodoméstico.

Ante todo, lo más aconsejable es adquirir una una nevera eficiente que pertenezca a las clases energéticas que menos consumen, pero si aún no tienes pensado cambiar tu nevera aquí te proporcionamos algunos tips que te ayudarán a reducir el consumo de tu nevera:

• Evitar a toda costa introducir alimentos calientes en tu nevera: esto aumenta mucho el consumo energético de tu nevera, pues se ve obligada a establecer un equilibrio y establecer una temperatura interior que obliga al compresor a trabajar el doble. Intenta siempre introducir únicamente alimentos que estén a temperatura ambiente.

• Evitar abrir y cerrar la puerta de la nevera constantemente: una buena forma de evitar este mal hábito es ordenar los alimentos correctamente. Así será mucho más fácil encontrar cualquier alimento que necesites y no tendrás la puerta abierta constantemente y, por lo tanto, esto disminuirá los vatios que usa el frigorífico para funcionar. También es aconsejable asegurarse siempre de que la puerta del frigorífico está cerrada correctamente.

• Limpia tu nevera al menos dos veces al año: es muy importante no dejar que se formen capas de hielo dentro de tu frigorífico y limpiarlo para que se mantenga en condiciones óptimas. También es aconsejable que si vas a pasar mucho tiempo fuera de tu vivienda, lo ideal es que lo desenchufes y lo limpies, siempre dejando la puerta un poco abierta para que no despida malos olores.

• No abuses del frío: regular correctamente la temperatura de tu nevera es esencial para que esta no haga un consumo excesivo. Cuanto más baja sea la temperatura, más vatios consume la nevera y por tanto, estás desperdiciando energía. Por eso, asegúrate de que la temperatura de tu nevera se mantenga entre entre 3 y 5ºC (con el congelador a -20 y -18ºC).