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¿Qué es la inmótica?
Se conoce como inmótica al conjunto de sistemas tecnológicos que permiten una gestión inteligente, automatizada y remota de un edificio o inmueble. En concreto, la inmótica se refiere a la automatización integral de aquellos edificios que albergan grandes dimensiones.
De esta forma, gracias al sistema de la inmótica, es posible gestionar al mismo tiempo distintos servicios comunes de un mismo edificio (climatización, iluminación, ascensores, etc.)
Diferencias entre domótica e inmótica
Es común que se confundan los términos domótica e inmótica, ya que en la práctica ambos sistemas son muy parecidos. No obstante, la domótica e inmótica no son lo mismo y cuentan con varias diferencias que se deben tener en cuenta.
La diferencia más evidente entre inmótica y domótica es su lugar de instalación. Mientras que el sistema domótico se aplica a viviendas comunes, la inmótica es la aplicación de alta tecnología en edificios no residenciales (hoteles, oficinas, hospitales, etc).
De igual forma, otra diferencia entre ambos sistemas es la tecnología empleada. Si bien esta es similar, la diferencia reside en que la inmótica gestiona la energía de forma integral mientras que la domótica la gestiona de forma individual.
Ventajas de la inmótica
Al igual que ocurre con la domótica, las ventajas de la inmótica son muchas. En concreto, al aplicar la inmótica a un edificio, se pueden subrayar las siguientes:
- Permite un mantenimiento mucho más óptimo de los edificios de grandes dimensiones. Esto se debe a que permite recibir avisos de fallos o averías en el soporte técnico.
- Mejora la infraestructura y los sistemas de comunicaciones del edificio.
- Posibilita el control del funcionamiento general del edificio. Esto se traduce en tener la opción de poder supervisar los estados de funcionamiento de la instalación de un edificio a través de únicamente un dispositivo y a distancia, mejorando la apertura automática de puertas, el sonido ambiente, los ascensores, etc.
- Es posible lograr un ahorro de más del 40% del gasto energético total del edificio evitando derroches eléctricos. Las estimaciones establecen que se puede lograr un ahorro de cerca de 50% en los centros comerciales, del 39% en oficinas y un 25% en hoteles y cerca del 18% en hospitales.
- Facilita la automatización del edificio y su eficiencia. Esto quiere decir que se pueden controlar mejor los sistemas de riesgo, realizar un balance de consumos energéticos, controlar la iluminación, programar el encendido y apagado de luces, subir o bajar las persianas, regular la temperatura y la ventilación de las estancias y más.
- Ofrece confort y una mejor seguridad debido a que, con la inmótica, es posible detectar problemas como una fuga de gas o cualquier fallo o incidencia que se produzca en el edificio, al mismo tiempo que se pueden recibir avisos de detección de fugas de gases nocivos o intentos de robo en la instalación; De igual forma, la inmótica también permite prevenir incendios y automatizar sistemas de control de edificios como programar horarios y alarmas.
¿Dónde se puede aplicar la inmótica?
Hoy en día, la inmótica cuenta con muchas aplicaciones en distintos campos. Este sistema, como ya hemos mencionado con anterioridad, tiene su aplicación en edificios complejos de grandes dimensiones del uso terciario o el ámbito industrial. Algunos de los edificios donde se emplea la inmótica en la actualidad son:
- Centros comerciales
- Centros educativos
- Centros médicos
- Hospitales
- Hoteles
- Cines
- Centros o plantas industriales
- Parques tecnológicos
- Edificios de oficinas
- Residencias de estudiantes o para mayores
- Instalaciones deportivas
- Gimnasios
- Bancos
- Ayuntamientos
- Aeropuertos
- Museos
Los edificios que han aplicado la inmótica en sus instalaciones se conocen como edificios inteligentes debido a la suculenta tecnología de automatización que llevan incorporada. Gracias a la inmótica, estos edificios ven cumplido su principal objetivo de lograr un alto nivel de confort, seguridad, ahorro energético, eficiencia y facilidad de comunicación.
Ahora bien, es importante conocer que, si bien el uso de la inmótica suele utilizarse en edificios de gran tamaño, esto no imposibilita que este sistema pueda utilizarse, por ejemplo, en edificios de menor envergadura. Es decir, aunque todavía no existen muchos ejemplos de esto, la inmótica podría adaptarse a edificios de menor tamaño, como podría ser una vivienda familiar.
