¿Qué es la electricidad estática?
Se trata de un exceso de carga eléctrica en la superficie de un objeto, y se la denomina “estática” porque la energía producida no se mueve, es decir, no existe un flujo de electrones. Las personas podemos sentirla en determinados momentos cuando estamos cerca de un objeto con carga opuesta a la nuestra, y sentimos un chispazo al tocarlo.
La acumulación de carga eléctrica se produce cuando, en un determinado momento, esta deja de ser neutra —que es su estado habitual— y se descompensa.
¿Qué provoca la electricidad estática?
La electricidad estática se provoca en materiales aislantes o no conductores cuando estos se rozan entre sí. Al haber una fricción entre ambos estos se cargan. El objeto que pierde electrones se carga positivamente, y el que los gana, negativamente. Por eso, al unirse se atraen entre sí.
Es lo que nos ocurre, por ejemplo, en un día de viento cuando al quitarnos la ropa el pelo se nos pega a esta. Nuestro cuerpo sería la carga positiva, mientras que la ropa habría ganado en negativa.
¿Qué materiales tienen más electricidad estática?
Hemos mencionado antes el pelo y, efectivamente, el cabello humano es uno de los materiales que más electricidad estática generan. También son propensos a ella materiales aislantes como el nailon, el poliéster, el propileno, el vidrio, el papel, el aluminio y los acrílicos.
Los objetos realizados con este tipo de materiales son capaces de generar mayor electricidad estática, como por ejemplo, telas, objetos metálicos o algunos tipos de muebles, así como alfombras o moquetas.
La electricidad estática puede provocar un chispazo, por ejemplo, al peinarnos o cuando tocamos a alguien. Esto ocurre cuando nuestro cuerpo está muy cargado y necesita descargar esa energía.
Para evitar esta situación hemos de utilizar ropa de algodón y evitar la fricción con materiales de plástico o aluminio. También es importante un ambiente húmedo, por eso los días de viento nos ocurre más a menudo.
