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¿Qué son los bonos verdes?
Los llamados bonos verdes son un tipo de deuda que emiten las organizaciones e instituciones tanto públicas como privadas para financiar o refinanciar exclusivamente proyectos responsables con el medioambiente y que deben estar alineados con los Green Bond Principles (GBP).
Estos bonos verdes permiten una nueva forma de inversión y financiación más responsable con el medio ambiente que apoya aquellos proyectos que tengan que ver con realizar una mejora para mitigar el cambio climático. Las finanzas sostenibles han ido ganando popularidad en los últimos años gracias a ese impulso de tomar iniciativas para mitigar los efectos devastadores que la crisis climática está ocasionando en el mundo.
La primera emisión de bonos verdes se llevó a cabo en el año 2007 por parte del Banco Europeo de Inversiones (BEI) y ,a día de hoy, en un mundo en el que las empresas son cada vez más conscientes de la gran importancia de invertir en la sostenibilidad, los bonos verdes son la alternativa de muchos inversores. A diferencia de otras formas de inversión, los bonos verdes hacen que los inversores puedan apoyar soluciones al cambio climático con herramientas seguras y sin tener que perder el beneficio financiero.
Principios de los bonos verdes
Los principios que siguen los bonos verdes son los siguientes:
- El uso de los fondos invertidos en los bonos verdes es exclusivo para proyectos verdes con un impacto beneficioso para el medio ambiente.
- El emisor de un bono verde siempre debe comunicar a sus inversores sus objetivos de sostenibilidad ambiental de forma transparente y permitir la evaluación y revisión externa.
- De igual forma, el emisor debe actualizar periódicamente la información sobre el uso de los fondos y las ganancias que tendrá el medio ambiente.
- La gestión de los fondos la controla el emisor de manera apropiada y transparente, y este debe permitir la revisión por parte de un auditor.
¿Qué proyectos se pueden financiar con bonos verdes?
Los bonos verdes se destinan a financiar una gran variedad de proyectos verdes que impactan de manera positiva en el medio ambiente.
Los proyectos dedicados a la eficiencia energética suelen ser muy comunes hoy en día, ya que el consumo doméstico de energía global supone el 21% de las emisiones de CO2 del planeta según datos recogidos por la ONU.
Las instalaciones sostenibles son lo más destacado dentro de los proyectos que reciben financiación de los bonos verdes. Muchas organizaciones están logrando realizar infraestructuras más respetuosas con el medio ambiente, optando por el uso de energías renovables para el funcionamiento de sus maquinarias.
También es muy común que los bonos verdes financien proyectos de movilidad sostenible o que contengan iniciativas orientadas al impulso de un transporte limpio y así poder reducir las emisiones de CO2 y otros gases de efecto invernadero.
La gestión de residuos es también un elemento clave hoy en día y son muchos los proyectos que la abordan en la actualidad. Recientemente han ido surgiendo algunas ideas innovadoras para dar una segunda vida a los objetos que ya no necesitamos, como es el ejemplo de la economía colaborativa.
Ventajas y desventajas de invertir en bonos verdes
Existen innumerables beneficios de emitir bonos verdes y financiar proyectos que permitan mejorar el mundo en el que vivimos. No obstante, aunque esto tiene muchas ventajas, también existen algunas desventajas que te mostramos a continuación.
Ventajas
Las ventajas más relevantes de invertir en Bonos verdes se traducen en obtener una diversificación de inversionistas y lograr un diálogo estrecho con los inversionistas a la par que se puede crear un un mercado que permita esta financiación de proyectos sostenibles.
Otra de las ventajas de invertir en Bonos verdes es que los riesgos derivados de la creciente presión internacional, política y social relacionados con la transición a una economía de bajo carbono se ven reducidos.
Asimismo, la fuente de capital crece debido a que el producto es demandado por inversores con mandatos ASG e incluso también por aquellos inversores que aparentemente no están interesados por los temas verdes.
Es así que la fuente de capital se impulsa primero, por las necesidades de las empresas para adaptarse al nuevo modelo económico, y segundo, por la implicación de los inversores de asignar el capital a las inversiones sostenibles y responsables.
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Desventajas
La principal desventaja que sufren aquellos que invierten en Bonos verdes es el conocer si de verdad se están usando los fondos para financiar proyectos responsables ambientalmente y socialmente hablando, o sí la empresa solo está intentando atraer clientes a través de estrategias de lo que se conoce como greenwashing o eco blanqueo.
En este sentido, es vital que existan iniciativas internacionales para evitar este greenwashing y no permitir que las distintas organizaciones que realmente no apoyen proyectos responsables aprovechen la oportunidad de vender productos bajo el respaldo de los bonos verdes.
