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¿Qué significa ECO en el frigorífico?
El modo ECO sirve para reducir el gasto energético al usar los electrodomésticos. Esto ayuda a que nuestra factura sea menos elevada, gracias a apostar por un consumo más eficiente.
Debemos saber que el modo ECO no significa “ecológico”, sino “económico”. Se emplea para ahorrar en la factura energética y, aunque su cometido no es el de producir menos efectos de gases invernadero, puede ayudarnos un poco en este sentido.
El modo ECO tiene un funcionamiento diferente según el tipo de electrodoméstico en el que se use. Por ejemplo, en lavadoras y lavavajillas el mayor gasto energético se produce al calentar el agua.
Así, en estos aparatos el modo ECO significará no solo reducir el gasto energético, sino que supondrá un menor consumo de agua.
Los frigoríficos emplean energía las 24 horas del día, siendo los electrodomésticos que más gasto producen en el hogar. De hecho, suponen hasta un 30 % del precio de la factura energética.
Para disfrutar de un menor consumo en el uso del frigorífico es importante tener un electrodoméstico reciente y con un etiquetado energético A o B.
Actualmente, las etiquetas energéticas se han cambiado. Su clasificación va de A a G, siendo A la etiqueta de mejor eficiencia energética y la G la de peor calidad. La A equivale a la antigua A+++ y la B a la A++.
El modo ECO en los frigoríficos se utiliza principalmente cuando nos vamos de vacaciones unos días. Este mantiene la temperatura del congelador a la mínima indispensable para que los productos congelados no se deterioren durante nuestra ausencia.
La parte de la nevera en el modo ECO puede permanecer con una temperatura de 8 °C. También, puede subirse hasta los 14 °C para evitar los malos olores en el frigorífico cuando este está vacío y estamos varios días fuera de casa. Es por eso que no debemos utilizar esta función para mejorar el consumo energético en nuestro día a día.
Algunas marcas emplean el modo llamado “Vacaciones” para conservar alimentos únicamente en el congelador, manteniendo la temperatura justa para que los productos continúen congelados.
Eligenio: Elegir bien, es genial
¿Cuánto consume el modo ECO del frigorífico?
En España gastamos una media de unos 290 kWh de electricidad, y el 55 % de esta inversión se destina a los electrodomésticos.
El frigorífico, el lavavajillas y la lavadora son los que más consumen y, entre ellos, la nevera es el aparato de la lista con un mayor gasto energético —entre 500 a 1100 Wh en 24 horas—. Esto supone en la factura un 30 % del total.
Si se emplea el modo ECO en el frigorífico, se puede llegar a reducir el consumo energético hasta en un 15 %.
Por otro lado, si utilizamos uno con etiqueta de eficiencia energética (A o B) lograremos disminuir el gasto hasta en 172 € al año, según la Asociación Nacional de Fabricantes e Importadores de Electrodomésticos de Línea Blanca (ANFEL).
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Cómo ahorrar con el programa ECO del frigorífico
Como el modo ECO está diseñado para ocasiones especiales en que emplearemos menos la nevera, no se suele usar como un programa de ahorro energético. No obstante, si deseamos reducir el gasto energético con nuestra nevera, debemos seguir esta serie de consejos:
- Procuremos no tener un frigorífico demasiado antiguo —más de 10 años—, pues estos aparatos reducen su eficiencia con el tiempo.
- Adquiramos uno con la etiqueta energética B o A (equivalente a A+++ o A++). Cuanto más alta sea la categoría, aunque el precio de su compra sea más elevado, tendremos una mayor eficiencia.
- Hagámonos con una nevera tipo Greenfreeze para que disponga de congelación automática.
- No escojamos un frigorífico grande, sino uno que tenga un tamaño apto para cubrir nuestras necesidades, según lo amplia que sea nuestra familia. Pues, a mayores dimensiones, más consumo.
- Instalemos el aparato lejos de cualquier fuente de calor. Por ejemplo, alejado de una ventana donde pueda impactar la luz del sol o apartado de la cocina, ya que si recibe calor su consumo aumentará.
- Coloquemos el frigorífico con una distancia de unos 5 centímetros con respecto a la pared trasera. De esta forma, tendrá mejor ventilación y eso favorecerá a la eficiencia.
- Limpiemos de vez en cuando la parte de atrás y eliminemos la suciedad con un aspirador, pues esto ayuda a mejorar su ventilación y optimizar su funcionamiento.
Además de su instalación y mantenimiento exterior, también es importante tomar esta serie de medidas en cuanto a su cuidado interior:
- Mantengamos limpias las rejillas o bandejas.
- Coloquemos los alimentos de forma que no dificulten la circulación del aire, es decir, sin pegarlos demasiado entre ellos, si nos es posible.
- Revisemos las juntas de estanqueidad de la puerta de modo que no permitan la salida del aire. Para comprobar su funcionamiento, podemos colocar una hoja de papel y, al cerrar, comprobar si esta se desliza con facilidad. Si esto ocurre, debemos cambiarlas.
- Mantengamos la temperatura de la nevera en un margen de unos 3 a 5 °C, o incluso más, adaptándonos al periodo estacional del año.
- Intentemos que la puerta no quede abierta y que su apertura sea durante el menor tiempo posible.
- Organicemos los alimentos correctamente. La bandeja más baja es útil para los productos que necesitan una mayor refrigeración, mientras que en la puerta es mejor almacenar los que no demandan tanto frío.
- Procuremos que la nevera no esté completamente llena. Eso mejorará la eficiencia energética al mejorar la circulación del aire.
El modo Eco en el frigorífico es una función que nos permite un ahorro energético en ciertas ocasiones específicas, por eso, te recomendamos que sigas estos consejos si lo que quieres es ahorrar en tu factura de la luz todos los días.
¿Te interesa saber más sobre cómo reducir tu gasto energético? Continúa navegando en nuestro blog.
