Seguro que lo que más te preocupa al llegar el frío es saber qué tipo de sistema de calefacción deberías elegir, ¿los emisores térmicos o los radiadores de aceite? Pues bien, este post te ayudaremos a tomar una decisión mostrándote las ventajas e inconvenientes de cada uno.
Eligenio: Elegir bien, es genial
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Diferencias entre emisor térmico y radiador de aceite
Como sabes muy bien, los emisores térmicos y los radiadores de aceite no tienen mucho que ver entre sí tanto a nivel de consumo energético como a nivel de rendimiento. Vamos a verlo:
1. El emisor térmico tarda menos en funcionar
Si te preocupa saber el tiempo que tarda cada aparato en calentar una casa, lo cierto es que el emisor térmico tarda menos tiempo en activarse y subir la temperatura de una estancia. En cambio, los radiadores de aceite son más lentos porque antes calientan el líquido en su interior.
2. El radiador de aceite es más fácil de mantener
Otro factor que deberías tener en cuenta a la hora de decantarte por los emisores térmicos o los radiadores de aceite es el grado de mantenimiento que necesitan. En este sentido, el radiador de aceite requiere menos revisiones porque el líquido interno no se debe cambiar.
Pero los emisores térmicos sí que requieren un mayor mantenimiento debido, en parte, a que utilizan algunas piezas que a veces pueden necesitar sustituciones. Por eso es que las revisiones deben hacerse periódicamente para garantizar que siguen siendo eficientes.
3. Los emisores térmicos se pueden programar mejor
Si quieres programar los aparatos de climatización para ser eficiente con el consumo de energía, debes saber que los emisores térmicos te dan opciones para programarlos incluso si no estás delante del equipo, mientras que un radiador de aceite es algo más limitado.
4. Los radiadores de aceite son menos atractivos
A nivel de diseño, los radiadores de aceite son menos versátiles y te vas a encontrar modelos muy parecidos en el mercado. En cambio, los emisores térmicos son mucho más modernos y versátiles, de hecho, puedes instalarlos donde quieras porque no son tan voluminosos.
¿Qué consume más?
Una de las cosas que seguramente más te importan es saber cuál de los dos aparatos de climatización consumen más energía. Para hacer los cálculos, principalmente vamos a tomar como referencia los 0,15 € que cuesta más o menos el kilovatio por hora en España:
- El radiador de aceite suele consumir una media de 1,5 kWh y, si lo usas durante 5 horas al día, el gasto económico mensual que tendrás es más o menos de 33 €.
- El emisor térmico suele consumir una media de 1,2 kWh y, si lo usas durante 5 horas al día, el gasto económico mensual que tendrás es más o menos de 27 €.
De media, el emisor térmico consume menos y te hace gastar menos dinero en las facturas mensuales. ¡Pero todavía no conoces los pros y los contras de cada aparato! Vamos a averiguar si es mejor usar radiadores de aceite o emisores térmicos, más allá del consumo.
Ventajas e inconvenientes de ambos sistemas
Ahora que ya tienes claras las diferencias entre los emisores térmicos y los radiadores de aceite, vamos a enumerar las ventajas e inconvenientes de usar un aparato u otro:
Ventajas y desventajas de los radiadores de aceite
- Son más seguros y gozan de una mayor estabilidad gracias al diseño. Por ejemplo, puedes sentir una mayor tranquilidad en casa al saber que el aparato está preparado para regular el sobrecalentamiento y no te quemarás si alguien tocara la superficie.
- Son más eficientes utilizando la energía, especialmente si lo enciendes en una habitación cerrada y con buen aislamiento. Esto implica que no necesitarás consumir tanta energía para disfrutar de una buena temperatura en casa.
- Tardan más en funcionar que otros sistemas de climatización, por lo que siempre que necesites subir la temperatura de la casa tendrás que esperar un poco a que llegue a calentarse el líquido interior del que se valen los radiadores de aceite.
- Son más silenciosos debido al diseño del aparato, que en este caso no cuenta con ventiladores que tengan que girar y hagan ruido. Si eres muy sensible a los sonidos o tienes mascotas y niños en casa, los radiadores de aceite son convenientes.
- Son fáciles de mantener porque los radiadores de aceite utilizan solamente un fluido interior que van calentando para subir la temperatura de casa. Por suerte, este líquido no lo tienes que sustituir con el tiempo, así que puedes despreocuparte un poco más.
- Tienen pocos diseños que hagan a los radiadores de aceite más atractivos, menos voluminosos y más compactos para poder instalarlos en cualquier sitio de la casa.
Ventajas y desventajas de los emisores térmicos
- Se puede instalar donde quieras gracias al poco espacio que ocupan los emisores térmicos. Esto es porque los aparatos no utilizan ningún depósito para almacenar el líquido interior, así que son menos voluminosos y mucho más discretos en el hogar.
- Requieren más mantenimiento para asegurarte de que los emisores térmicos funcionan a la perfección. Como los modelos son modernos, utilizan más piezas que a veces requieren sustituciones. Las revisiones tendrían que hacerse periódicamente.
- Se calientan rápidamente para esos momentos en que quieres subir la temperatura de la casa en un momento. Como los emisores térmicos no tienen que calentar ningún fluido interior, no es necesario que esperes tanto tiempo hasta que se ponen a trabajar.
- Se puede programar a distancia para regular la temperatura incluso cuando no estás delante de los emisores térmicos. Es una forma mucho más precisa de optimizar el consumo de la energía sin que repercuta en tu comodidad y bienestar dentro de casa.
- Consumen menos energía y te ayudan a ahorrar más dinero en las facturas mensuales, por lo que si te preocupa optimizar el consumo energético y gastar menos dinero al mes, los emisores térmicos podrían ser la solución más sofisticada.
Qué es mejor, ¿un emisor térmico o radiador de aceite?
Como ves, los emisores térmicos y los radiadores de aceite tienen sus puntos positivos. Por eso, ¿cuál te conviene comprar? Pues todo depende de tus necesidades. Si lo que quieres es consumir menos energía y regular la temperatura a distancia, te conviene el emisor térmico.
En cambio, el radiador de aceite te conviene más si prefieres priorizar la seguridad, el silencio y la eficiencia. Por ejemplo, si vives con niños o mascotas, te conviene más usar un radiador de aceite cuya superficie no queme y caliente habitaciones cerradas eficientemente.