La energía undimotriz se ha convertido en una de las fuentes renovables que podrían cubrir gran parte de la demanda energética global frente a otros tipos de recursos limpios, como la energía mareomotriz, y sin emitir gases tóxicos en el medio ambiente.
Ya la Agencia Internacional de Energías Renovables explicó que la energía olamotriz es capaz de producir alrededor de 29.000 teravatios la hora, un número infinitamente superior al que es capaz de crear la energía procedente de los cambios de las mareas.
¿Qué significa la energía undimotriz para el futuro verde en el mundo? En este artículo veremos cómo funcionan las tecnologías que promueven esta fuente renovable y cuáles son las ventajas e inconvenientes a la hora de usarla en los ámbitos energéticos.
Índice de Contenidos
¿Qué es la energía undimotriz?
La energía undimotriz, que también llamamos olamotriz, es aquella energía cinética y mecánica procedente del movimiento de las olas marinas, la cual se transforma en energía eléctrica con la ayuda de tecnologías diferentes y respetuosas con el planeta.
A diferencia de la energía mareomotriz, que aprovecha los cambios de las mareas para generar electricidad, la energía olamotriz se encarga de explotar la fuerza de las olas para producir energía eléctrica con la ayuda de unas turbinas instaladas en el fondo marino.
La fuerza mecánica de las olas es totalmente dependiente de la radiación del sol, que calienta el agua, y de la velocidad del viento, que aumenta su energía y tamaño. La primera central dedicada a la recolección de energía se creó en Australia en el año 2014.
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Ventajas y desventajas de la energía undimotriz
No cabe duda de que el movimiento de las olas es generadora de energía renovable y respetuosa con el medio ambiente. Uno de sus grandes beneficios es que no necesita ningún tipo de combustión ni emite gases nocivos durante la producción eléctrica.
Eso no quiere decir que, hoy en día, la energía undimotriz no se encuentre en una fase temprana de desarrollo en la que se pretende conocer su nivel de potencial completo para tomar las medidas adecuadas de cara a un futuro energético más eficiente y responsable.
De hecho, actualmente sigue siendo necesaria la inversión pública y privada para explorar todas las posibilidades tecnológicas de la infraestructura undimotriz. Esto quiere decir que la energía undimotriz es cara y que su instalación todavía es endeble y requiere mejoras.
No obstante, de llegar a perfeccionarse la instalación de las tecnologías undimotrices se podría instalar esta infraestructura novedosa en muchos territorios del planeta, dado que el 70% de la superficie está ocupada por agua que produciría entre 20 y 40 kW por ola.
Por último, cabría considerar una mejor estrategia para colocar las tecnologías y materiales undimotrices sin tener que modificar el entorno y provocar irregularidades en la biodiversidad local, particularmente en la fauna marina de cualquier ecosistema de costa.
De tener en cuenta estas ventajas y desventajas de la energía undimotriz, el mundo estaría a un paso más cerca de conseguir un futuro energético sostenible, limpio y eficiente.
Cómo funciona la energía undimotriz y qué tecnologías usa
La energía undimotriz utiliza ciertas tecnologías que se activan con la ayuda del calor del sol y la velocidad del viento. Estos factores son importantes porque de ellos depende el tamaño y la potencia de las olas, las cuales, luego, van a producir la energía eléctrica.
Los dispositivos undimotrices que forman parte de tales tecnologías y que se usan para captar la energía mecánica y cinética de las olas son seis y los definimos de esta manera:
Columna de agua oscilante
La columna de agua oscilante es un dispositivo que se usa cuando el oleaje es fuerte y se quiere aprovechar su energía mecánica y cinética. Para recolectar tal energía se emplea un colector en columna, acompañado de un pistón y una turbina que produce electricidad.
Sistema de rebosamiento
El sistema de rebosamiento es un método que está formado por una rampa y una turbina hidroeléctrica de baja caída que sirve para captar la energía de una ola rebosante.
Atenuador
El atenuador es una tecnología parecida a unas boyas interconectadas. Las piezas del atenuador, dispuestas de forma perpendicular en el mar, captan la energía de las olas que las alcanzan al activar unas bombas hidráulicas capaces de producir electricidad.
Amortiguador de punto
El amortiguador de punto es otro tipo de tecnología undimotriz que se encarga de captar la energía de las olas en movimiento, capaces de producir ondas en una plataforma fija. Se genera electricidad a partir de esas ondas usando el bombeo de fluido o un generador.
Convertidores
Dentro de un sistema undimotriz se pueden utilizar varios tipos de convertidores, los cuales generan electricidad de las olas con diferentes métodos. Así pues, el convertidor flotante es una tecnología que flota en la superficie del mar y capta el ascenso y descenso de la ola.
El convertidor oscilante de ola es muy parecido al convertidor flotante, ya que el primero también capta la oscilación ascendente y descendente de la ola. La diferencia es que este convertidor no se queda flotando en la superficie del agua, sino que permanece sumergido.
Por último, el convertidor sumergido de presión diferencial es la tecnología más moderna de entre todos los convertidores. Está formada por unas membranas que generan presiones distintas entre las olas y el agua para, al mismo tiempo, producir electricidad.
Masa giratoria
La masa giratoria, que también conocemos como absorbedor puntual, es una tecnología que flota en la superficie del agua y que se encarga de captar la potencia de las olas independientemente de la dirección de las mismas.
¿Dónde se utiliza?
La energía undimotriz es especialmente interesante para la industria costera debido a las tecnologías adaptadas a estos tipos de entornos marítimos. De hecho, la electricidad que genera el movimiento de las olas podría servir para desalinizar el agua de mar por bombeo.
Pero no solo eso, también se está explorando la posibilidad de emplear la energía olamotriz para propulsar embarcaciones, para extraer agua potable de los océanos y para generar hidrógeno. Las viviendas costeras también tendrían luz generada por la energía de las olas.
Dado que las tecnologías undimotrices todavía están en pleno desarrollo, en España ya hay varias centrales de investigación que exploran las posibilidades energéticas de las olas y esperan que las inversiones para conseguir estos objetivos aumenten de cara al año 2030.