¿Qué hacer si el inquilino no paga la luz?

Una de las peores cosas que te pueden pasar cuando alquilas una casa es darte cuenta de que el inquilino no paga la luz. Antes de que entres en pánico, tenemos todas las medidas de acción que puedes tomar para evitar que el alquilado rompa el contrato de arrendamiento.

¿Qué debo hacer si el inquilino deja de pagar la luz?

Si el inquilino deja de pagar la luz, te damos el pésame. Ahora toca buscar una solución eficaz que no te ponga en problemas con la suministradora. La alternativa más eficaz que tienes es interponer una demanda de desahucio por impagos.

Es importante obtener asesoramiento legal a la hora de iniciar este procedimiento, para tener conocimiento de como llevarlo en cada paso y asegurarse que se respeten tanto los derechos del propietario como los del inquilino, así como recopilar toda la documentación relacionada con el contrato de alquiler y los pagos pendientes, lo que servirá como evidencia durante el proceso legal.

Además, se debe enviar una notificación formal al inquilino, indicando los términos del incumplimiento y otorgando un periodo específico para remediar el impago antes de proceder con la demanda.

Cabe recalcar que el desahucio por impagos es un recurso legal extremo que debe utilizarse cuando otras negociaciones y tentativas de acuerdo han fallado. Este proceso no solo busca recuperar la propiedad, sino también asegurar la compensación por los pagos atrasados y cualquier otro daño financiero causado durante el período de impago.

Al seguir estos pasos, puedes minimizar las interrupciones y garantizar que el procedimiento se maneje de manera justa y conforme a la ley.

Y… ¿Qué no se debe hacer?

En muchas ocasiones, a causa del desconocimiento, la mayoría de personas que han pasado por esta situación se decantan por llevar a cabo acciones que no son del todo las correctas, como cortar la luz o dejar de pagar las facturas mensuales.

Cortar la luz

La primera opción es delicada porque te puede ocasionar perjuicios si el inquilino se pone en tu contra. Cuando un propietario considera cortar el suministro de luz como medida frente a un inquilino que ha dejado de pagar, debe tener en cuenta que esta acción puede ser legalmente delicada y tener repercusiones significativas.

En muchos lugares, cortar deliberadamente los servicios básicos a un inquilino, incluso en caso de impago, puede ser considerado como un desalojo ilegal, que le estás intentando echar, o una violación de los derechos del inquilino.

Si el inquilino decide llevar el caso ante las autoridades o iniciar un proceso legal, el propietario podría enfrentarse a sanciones legales, multas o incluso requerimientos para restablecer el servicio.

Dejar de pagar las facturas

Por otro lado, optar por dejar de pagar las facturas mensuales también presenta riesgos significativos.

Esta acción podría resultar en la acumulación de deudas y en la posible interrupción del servicio por parte de la empresa suministradora, lo que no solo afectaría al inquilino sino que también podría complicar la situación legal y financiera del propio propietario.

Además, la falta de pago podría afectar negativamente tu historial crediticio si los suministros están a tu nombre.

Antes de tomar esta medida, es aconsejable buscar asesoramiento legal para explorar otras vías de acción y asegurarte de que las acciones tomadas estén dentro del marco legal y no generen consecuencias adversas a largo plazo.

¿Quién paga los suministros en un alquiler?

Saber quién paga los suministros en un alquiler no es tan simple como parece, entre otras cosas porque los suministros se pueden dar de alta o no. Mira lo que pasa en los dos casos:

Si los suministros están a nombre del propietario

En casos donde los servicios básicos como electricidad, agua y gas están registrados a nombre del propietario, el inquilino se hace responsable de los pagos mensuales o periódicos correspondientes al consumo real de estos servicios durante el periodo de alquiler. Es importante que ambos, propietario e inquilino, establezcan claramente esta responsabilidad en el contrato de arrendamiento para evitar malentendidos.

Sin embargo, mientras que el inquilino asume los costes operativos, cualquier gasto asociado a modificaciones estructurales y administrativas, reparaciones mayores o mejoras en las instalaciones de estos servicios, así como los costes por informes técnicos y revisiones reglamentarias necesarias para garantizar la funcionalidad y seguridad de las instalaciones, debe ser cubierto por el propietario. Esto incluye, por ejemplo, la sustitución de componentes obsoletos o averiados que excedan el desgaste habitual esperado.

Si los suministros están a nombre del inquilino

Cuando los servicios de luz, agua y gas se registran a nombre del inquilino, este último asume la totalidad de los gastos asociados a dichos suministros. Esto abarca no solo el pago del consumo, sino también todos los costes administrativos relacionados, como pueden ser los cargos por cambio de titularidad y cualquier otra tarifa que pueda imponer la compañía de suministros.

El inquilino deberá mantener el pago de estos servicios hasta la finalización de su estancia en la propiedad, asegurándose de que todas las cuentas estén saldadas para evitar la transferencia de deudas al propietario o a futuros inquilinos. Al término del contrato de arrendamiento, el inquilino es responsable de gestionar la baja de estos servicios o, si procede, la transferencia de titularidad al nuevo ocupante o de vuelta al propietario, según se establezca en el acuerdo de alquiler.

¿Es mejor que el inquilino pague la luz a su nombre?

Técnicamente sí que es mejor que el inquilino pague la luz a su nombre, sobre todo porque a nivel legal es el titular del contrato el que tendrá una deuda con la suministradora y no tú. Esto es porque tan solo el titular es el que está legalmente obligado a pagar los gastos de luz.

Así que imagínate que finalmente tu inquilino es el titular del contrato de luz. Si tu inquilino se decidiera a no pagar sus gastos de luz mensuales en algún momento durante el contrato de arrendamiento, tú no eres responsable de pagar los gastos. La deuda es solo del inquilino.

¿Cómo saber si el inquilino ha dejado de pagar la luz?

Ver que el pago de las facturas de luz de tu inquilino se está retrasando cada vez más es una de las pesadillas a las que se puede enfrentar un arrendador. Pero darte cuenta de esto no es fácil porque antes tienes que consultar si realmente el inquilino ha dejado de pagar la luz, y las deudas que está acumulando.

Un inquilino que no paga la luz está generando una deuda de la que tú, como arrendador, no tienes por qué ser consciente. Para saberlo, tendrías que solicitar una Nota Simple de tu casa, que es donde aparecen datos valiosos sobre la vivienda, entre ellos las cargas que tiene. La solicitud la tienes que hacer en el Registro de la Propiedad de la región donde tengas la casa. En la Nota Simple aparecerá el nombre del titular, la identificación del inmueble y la deuda que se haya generado sobre el inmueble en sí mismo. Esto último es lo que te interesa.

¿Cómo se pagan los suministros normalmente?

Si esto te parece un lío, no te preocupes, porque le pasa a mucha gente. Esa es la razón por la que hay arrendadores que no quieren hacer ningún trámite de altas o bajas y prefieren seguir siendo titulares de los suministros. ¿Qué se hace en este caso? Pues hay dos opciones:

• El arrendador envía los recibos con los gastos de suministro mensuales al inquilino para que le pague cada mes. Es como un acuerdo pactado entre las dos partes, pero exige que el arrendador esté pendiente de recibir los pagos todos los meses.
• El arrendador cambia el número de cuenta bancaria para que el inquilino pueda pagar los gastos de suministro mensuales a ese número directamente. Es la forma más fácil en que el arrendador se olvida de tener que estar pendiente de recibir los pagos.

Ya ves que con estas dos opciones puedes saber si tu inquilino paga la luz y el resto de suministros cada mes. Pero siempre corres el riesgo de que un día tengas un inquilino que no paga la luz. Por eso deberías plantearte si es mejor que el inquilino pague la luz a su nombre.

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Cómo evitar que el inquilino no pague la luz

La mejor manera de evitar que el inquilino no pague la luz es dejando claro en el contrato de arrendamiento quién va a pagar los gastos de suministro desde el principio, así como la forma en que se efectuará el pago. Es importante que conste con transparencia en el contrato.

Otra cosa que puedes llevar a cabo es negociar con el inquilino para hacer un cambio de titular en el contrato de la luz. Así la suministradora solo va a ver responsable al inquilino si no asume algún pago mensual, que es lo justo puesto que es el inquilino quien va a usar la luz.