Poder calorífico superior: ¿Qué es?

El poder calorífico superior (PCS) es un parámetro que se utiliza mucho en las industrias para saber cuánto calor produce un combustible al quemarse. Esta propiedad es importante para medir la eficiencia del combustible a la hora de fabricar aparatos de calefacción doméstica.

En cuanto a la medida en sí, el PCS se expresa en unidades de energía por unidad de masa, es decir, en Megajulios por kilogramo (MJ/kg) o en kilocalorías por gramo (kcal/g). Cuanto mayor es el poder calorífico de un combustible, mayor es el calor que genera al quemarse.

¿Cómo calcular el poder calorífico superior?

El poder calorífico superior se calcula a partir de la cantidad de calor liberada durante la combustión completa de un combustible. En este sentido, los gases de la combustión tienen que estar a una temperatura de 25 °C y una presión de 1 atmósfera para hacer el cálculo.

La fórmula general para calcular el PCS de un combustible es:

• PCS = Q / m, donde:
• PCS = Poder calorífico superior (en MJ/kg o kcal/g)
• Q = Calor liberado durante la combustión completa del combustible (en MJ)
• m = Masa del combustible consumido (en kg)

Tipos de poder calorífico

Hay dos tipos de poder calorífico que se pueden medir al fabricar un aparato de climatización:

• El poder calorífico inferior, que no incluye el calor latente de vaporización del agua
• El poder calorífico superior, que incluye el calor latente de vaporización del agua

En el caso, del poder calorífico superior, su valor siempre es mayor que el poder calorífico inferior cuando se calculan. Esto se debe precisamente a que el primero sí que incluye el calor latente de los gases del combustible, mientras que el segundo no lo incluye en el cálculo.

Vamos a verlo con más detenimiento a continuación.

Diferencias entre Poder Calorífico Superior (PCS) y el Poder Calorífico Inferior (PCI)

La principal diferencia entre el poder calorífico superior (PCS) y el poder calorífico inferior (PCI) lo encontramos en el calor latente de vaporización del agua que se genera durante la combustión. Y es que, aunque el PCS tiene en cuenta este calor latente, el PCI no lo hace.

¿Qué significa esto? Que el PCS siempre va a ser mayor que el PCI, ya que el primero solo tiene en cuenta la energía liberada por la condensación del vapor de agua contenido en los productos de la combustión. En la práctica, esto se traduce en una mayor eficiencia energética.

Veamos atentamente las características del Poder Calorífico Superior (PCS) y el Poder Calorífico Inferior para entender mejor por qué no son lo mismo y tienen claras diferencias:

• El PCS incluye el calor latente de vaporización del agua que se genera en la combustión del combustible.
• El PCI no tiene en cuenta el calor latente de vaporización del agua producido en la combustión del combustible.
• El PCS es una medida más alta que el PCI, ya que tiene en cuenta la energía liberada durante la condensación del vapor de agua.
• El PCI es una medida más baja que el PCS, ya que no considera la energía liberada durante la condensación del vapor de agua.
• El PCS es la medida que se utiliza con mayor frecuencia en la industria del gas natural y del petróleo.
• El PCI es la medida que se utiliza comúnmente en la industria de la biomasa y de los biocombustibles.

Sin embargo, algo que tanto el Poder Calorífico Superior como el Poder Calorífico Inferior sí que tienen en común es que los dos se expresan en MegaJulios por kilogramo (MJ/kg) o en kilocalorías por kilogramo (kcal/kg) cuando se calcula su valor con la fórmula general.

Poder calorífico de los principales combustibles

El PCS de los distintos combustibles varía en función de varias cosas, principalmente:

• La composición química, es decir, de los elementos y compuestos que lo conforman.
• El proceso de combustión, como la temperatura, presión y tiempo de reacción, que determinan si la energía que se libera durante la combustión es eficiente o no.

A continuación, te dejamos los valores aproximados del poder calorífico superior que suelen tener algunos de los combustibles más utilizados en la actualidad:

Estos valores son orientativos y pueden variar en función de la calidad y origen del combustible. Lo más importante de todo es que tengas en cuenta el poder calorífico del combustible que elijas, ya que de él depende la eficiencia del aparato y su coste.

Volver al índice del glosario