¿Qué es la centralización de contadores?
La centralización de contadores se refiere a la agrupación de medidores o contadores eléctricos en una ubicación centralizada en lugar de tenerlos dispersos individualmente en diferentes lugares. Esta práctica se utiliza comúnmente en edificios de múltiples unidades, complejos residenciales o comerciales, y otras instalaciones con múltiples puntos de consumo de energía eléctrica.
En lugar de instalar contadores individuales en cada unidad o local, la centralización de contadores implica montar los medidores en una sala o ubicación específica, como una sala de contadores. Desde esta ubicación central, se puede medir y monitorear el consumo de electricidad de cada unidad o punto de consumo de manera más eficiente. Esto simplifica el proceso de lectura de medidores y la gestión de facturación.
Normativa sobre centralización de contadores
La normativa sobre la centralización de contadores eléctricos varía según el país y las regulaciones locales. Sin embargo, en general, estas regulaciones se establecen para garantizar la seguridad, la eficiencia y la equidad en la medición y distribución de la energía eléctrica en edificios y complejos con múltiples unidades de consumo.
También, la normativa se ve influenciada por la cantidad de medidores instalados en un edificio ya que, si el número de medidores es de 16 o más, se requerirá un espacio específico; si no se llega a esta cifra, se pueden alojar en un armario designado. Es crucial destacar que este armario tiene un uso exclusivo para el almacenamiento de estos contadores.
Elementos de la centralización de contadores
La centralización de contadores se configura mediante un diseño compuesto por columnas derivadas de un interruptor que se ramifican en diversos sistemas de protección. Estos sistemas desempeñan un rol crucial al salvaguardar la instalación ante sobretensiones y portafusibles que podrían resultar en daños significativos.
Parte integral de la centralización de contadores, el embarrado de entrada aglutina todos los componentes relacionados con la alimentación de la instalación. Este punto crítico, por lo general, incorpora una protección aislante que garantiza la seguridad.
Posteriormente, los fusibles de seguridad se montan sobre el embarrado de entrada, por lo general en forma cilíndrica. Además, las conexiones, en la mayoría de los casos, se establecen mediante cables de cobre. Esta elección se fundamenta en la naturaleza aislante del cobre, minimizando el riesgo de incendios y, en caso de producirse uno, previniendo la propagación del humo.
Todos estos elementos se unen para formar la centralización de contadores, un sistema fundamental para asegurar el rendimiento y la seguridad eléctrica en diversas aplicaciones.
