La energía que nos da el sol puede aprovecharse de muchas maneras, y cocinar alimentos o calentar nuestra vivienda es una forma eficiente de ahorrar dinero mientras cuidamos del planeta. En España, la calefacción con energía solar se ha vuelto cada vez más popular.
Este tipo de calefacción solar térmica consiste en emplear la radiación del sol para generar calor en el interior de una casa, cocinar y calentar agua. Por suerte, se puede combinar con instalaciones térmicas convencionales, y así incluir la energía renovable en nuestras vidas.
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¿Cómo funciona la calefacción con energía solar?
Para entender cómo funciona la calefacción con energía solar, es fundamental tener en cuenta que esta se compone de varios elementos para hacer su trabajo:
- Captadores solares
- Circuito primario y secundario
- Intercambiador de calor
- Acumulador
- Vaso de expansión
- Tuberías
La calefacción con energía solar está conformada por un circuito hidráulico, que está especialmente preparado para captar y reservar la energía solar, ya que contiene un líquido que absorbe el calor, y lo traslada por una tubería enrollada hasta el acumulador.
Dentro del acumulador está el agua que usamos para nuestros quehaceres diarios: para ducharnos, para calentar las estancias o para que el agua de los grifos salga caliente.
Además, la calefacción con energía solar también cuenta con su propio sistema de control, que se pondrá en funcionamiento en caso de que el agua no alcance la temperatura que deseamos. Por lo tanto, la calefacción solar térmica puede producir calor complementario.
¿Cuántas placas solares se necesitan para tener calefacción?
Si tenemos en consideración que la instalación de una calefacción, que funciona con energía solar, se prepara para cubrir un poco menos del 50% de nuestras necesidades energéticas, lo más usual es utilizar entre seis y siete placas solares térmicas en una residencia familiar.
Cuando a este número de placas solares térmicas le sumamos un termosifón de trescientos litros y una calefacción solar por suelo radiante, lo que conseguiremos es ahorrar hasta un 40% en calefacción como máximo, mientras que el ahorro en agua caliente será completo.
La razón por la que se suelen instalar menos placas solares térmicas de las necesarias para cubrir toda la demanda energética es económica, puesto que no sería nada rentable para el consumidor el dinero que habría que invertir hasta conseguir disfrutar de la amortización.
Por eso, es recomendable siempre acompañar una calefacción auxiliar a la instalación solar térmica para poder cubrir toda la demanda energética de nuestra vivienda.
¿Qué calefacción se puede poner con placas solares?
En la actualidad, cada vez son más las calefacciones auxiliares que podemos usar junto a las placas solares térmicas: bombas de calor, radiadores, calderas o incluso calefacciones por suelo radiante. Todas ellas nos ayudan a cubrir la energía completa que necesitamos.
Calefacción solar con radiadores
La calefacción solar con radiadores es un aparato que emplea el calor que obtiene de la luz del sol para generar agua caliente. Algunas calefacciones se conectan directamente al circuito de agua caliente sanitaria y otras emplean bombas de calor para calentar el agua.
Suelo radiante
La calefacción que funciona por suelo radiante funciona de la misma manera que el resto de las calefacciones convencionales, si bien es cierto que este tipo de calefacción se instala por debajo del suelo. Algunas personas también pueden adquirir sistemas de frío.
Un sistema como este usa la aerotermia para generar calor o frío mediante un mecanismo, que permite que circule agua caliente por un conjunto de tuberías bajo el pavimento.
Estufas y termos
Las estufas y los termos también son buenos sistemas de calefacción auxiliares, ya que lo único que necesitamos es que la instalación solar térmica traslade la electricidad que genera hasta estas calefacciones para que se activen y empiecen a producir calor.
Bombas de calor
Las bombas de calor pueden incorporarse, tanto como instalación térmica como fotovoltaica, ya que la energía que obtienen se puede trasladar al agua sanitaria o a la calefacción.
Cualquier bomba de agua se activa mediante el ciclo de compresión, que favorece al poco consumo energético mientras seguimos sacando los mismos beneficios térmicos.
Calentadores por convección
Los calentadores por convección reciben este nombre porque se activan para calentar las estancias de casa mediante electricidad transformada a partir de energía solar fotovoltaica. Estos calentadores auxiliares son recomendados porque tienen un ratio de eficiencia alto.
Estos aparatos eléctricos se instalan directamente en la pared de la estancia que elijamos, y se dedican a calentar el aire por transmisión. Como se pueden adaptar a las instalaciones solares, tales calentadores también se suelen considerar calentadores solares.
Elige con el genio del ahorro
¿Qué sistema de calefacción solar es más rentable y eficiente?
La calefacción solar que más nos conviene para proporcionar calor a nuestra vivienda es la que funciona por suelo radiante, ya que esta solamente utiliza una temperatura de 40ºC y, además de lograr calentar la casa fácilmente, ahorramos más en el consumo energético.
Los radiadores, en cambio, son menos convenientes sencillamente porque producen un mayor gasto energético al tener que emplear una temperatura que asciende a los 90ºC.
Es importante, de todas formas, que sepamos exactamente cuánto consumo energético gastamos cada año antes de proceder con la instalación de un sistema de calefacción, ya que no nos conviene tener excedentes de energía para aumentar la rentabilidad térmica.
